Para aquellos que quieran saber de qué se trata el género Bollywood, pero en una versión más ligera u “occidentalizada”, la directora Gurinder Chadha (que lograra fama mundial con su comedia futbolera “Bend it Like Beckham”) ha creado uno de los primeros híbridos con los elementos más caracteríscos del musical hindú (incluyendo la tradición de que, aunque hay mucho coqueteo, los enamorados nunca se besan en la pantalla). La cinta desesperará a muchos por el tono en el que se maneja, las actuaciones un tanto planas y que algo tiene de otra época cuando se hacía cine con más ingenuidad, pero servirá como señuelo para aquellos que quieran sumergirse más en este tipo de películas.
Básicamente, “Bride and Prejudice” es una adaptación “globalizada” del clásico de Jane Austen pero que se lleva a cabo entre la India, Londres y los Estados Unidos en donde los enredos giran alrededor de Lalita (Aishwarya Rai) y Will Darcy (Martin Henderson) y la decisión de la primera de casarse sólo por amor, contrario a los deseos de su madre, quien ya se ha dispuesto a conseguirles marido por su cuenta a sus cuatro hijas.
Para Lalita, la señora Bakshi ha escogido a Mr. Kholi (Nitin Ganatra un hindú tan americanizado que se convierte en el mejor “comic relief” de toda la cinta y que le roba cámara a casi todo el resto del elenco). Pero, como es obvio, Lalita no está de acuerdo. Así que ella y Darcy tendrán que vivirvarios infiernos para poder estar juntos a final de cuentas. Los números musicales cuentan con el impresionante estatus de las producciones bollywoodenses, que han sido las únicas capaces de rescatar el musical y que se nos presentan llenas de colorido, ingeniosas coreografías y… ¿elefantes?. Bueno, al fin y al cabo eso es Bollywood.
