Una de las mujeres clave del rock pop mexicano actual junto a Julieta Venegas es, sin duda, Ely Guerra. Con una reputación cimentada en excelentes discos y una camaleónica personalidad en el escenario, Ely no ha sucumbido a la trampa de ser demasiado pop para su propio bien y en estos días continúa dándole los últimos toques a su más reciente disco de temas inéditos, aunque en las tiendas el 29 de Abril ha aparecido un disco que es más bien de temas conocidos pero reinterpretados de manera “unplugged” para la serie de EMI llamada “Plug & Play”, que también ha editado discos similares de Aleks Syntek y Moderatto. Hablamos con Ely acerca de este disco de transición y las otras mujeres que han venido antes y después de ella para formar todo un movimiento de cantautoras mexicanas que tienen en común el ser talentosas y artísticamente ambiciosas.
Plug & Play
Pues, este disco se llama “Plug & Play” y es algo que está haciendo MSM por Internet y estuvimos tres artistas de esta nueva camada, que son Aleks Syntek, Moderatto y yo. Mi disco es completamente acústico, porque son siete canciones que canté en ese concierto con voz y guitarra. Es una manera, quizás muy autentica, de estar haciendo un trabajo pues es grabado en directo y con fans como muy allegados, ya que ésta es una convocatoria que hizo EMI en su auditorio ahí mismo en la ciudad de México y entonces, es un trabajo peculiar. Me agrada que me hayan invitado, es muy cortito, son siete rolas.
Con solo una guitarra
Yo hago gira así y hago gira con la banda, pero la verdad es que es un gusto y creo que la gente percibe quién eres. Cuando yo hago mis canciones en mi casa o donde me toque escribir, ésa es la manera en que voy hacia mi trabajo creativo y es bonito sentirse vulnerable, además de que significa defenderse solo con una guitarra ante una audiencia que puede ser exigente, porque salir nada más con una guitarra habla de tu escala como músico, de tu escala como cantante o como compositor, habla de tu fuerza en el escenario o de tu debilidad dentro de él. Es una situación tan diferente y tan vulnerable… casi sexual, como cuando te van a dar un beso o cuando te atreves a hacer por primera vez algo en un terreno desconocido, es interesante. Para mí, es bonito.
Puente generacional (hacia adelante)
Pues, el otro día llego a mi casa un paquete muy lindo y muy adornado, y era la envoltura del disco de Ximena, en donde venía una carta dirigida a mí. Me hicieron sentir que ella tiene un respeto para con mi trabajo creativo y eso hace que a las generaciones que comienzan, nosotros también podamos apoyarlas. Porque, efectivamente hay un espacio grande, y Natalia (Lafourcade) a pesar de que empezó hace ya un rato tiene casi la misma edad que Ximena —me parece—, y son muy chavitas y son muy talentosas y es muy lindo que haya un espíritu femenino creativo, porque mujeres hay muchas pero quizá están mas entregadas al trabajo creativo masculino y es muy bonito empezar a descubrir nuevas compositoras que están como unom haciendo camino y nosotras no lo tenemos del todo resuelto.
En este país sigue habiendo una manera muy miserable de observar a la música femenina. Así que nos juntamos más al grupo y a la esencia, ya que de alguna manera es muy agradable escuchar a mujeres creativas expresarse y que no sea una situación de, “somos diferentes y somos capaces” y todo esto tan de flojera… es simple y sencillamente una expresión necesaria. Perdón que lo diga, pero la energía femenina también tiene un plano importante dentro de la sociedad y es lo que amamantamos, es como crecimos ¿no?
Puente generacional (hacia atrás)
Ayer fui al súper y justamente me topé con Liliana Felipe y nos dio mucho gusto vernos; y teníamos mucho tiempo de no hablar y ella esta metidísima con lo de López Obrador, ya tiene tres años desgastándose en esa historia y entonces fue un encuentro increíble. Son mujeres increíbles, con una capacidad creativa impresionante y además con una personalidad muy fuerte y muy determinante, y eso es lo que tiene la Astrid (Haddad), lo que tiene la Jesusa (Rodríguez)s, lo que tiene la Liliana -no se diga la Liliana que aporrea el piano y canta mala como la chingada, es una tipa increíble- y volverla a ver y verla diciéndome esta postura política tan definida es increíble. Son mujeres que son ejemplos a seguir, que en lo que tú hagas como tú lo hagas son un ejemplo a seguir, porque están determinadas a hacer algo y a luchar por eso y yo creo que esa es la convicción que requiere hoy en día un proyecto femenino.
Si no tienes esa convicción te conviertes en cualquier cosa y entonces se desintegra el culto a esa energía femenina, pero mientras tengas convicción y tengas la capacidad de seguir adelante con tus ideas y con tu forma creativa, yo creo que la música latinoamericana hecha por mujer tiene un espacio de por vida que siempre va a seguir y que así como ella es un ejemplo a seguir para mí, quizá las generaciones más nuevas nos miren a una Julieta o a mí, o a una nueva Natalia o Ximena y a todas estas mujeres como eso que vino antes.
USA
Pues, es tan importante como estar con el público de aquí o como si me invitan a Europa. Los latinos estamos en todos lados y es una manera de transmitir quiénes somos, el arte, la música y lo que exprese un ideal de vida es importante compartirlo. Yo creo que cuando uno genera artísticamente un proyecto creativo es importante manifestarlo donde te dejen.
Si yo voy a California es porque tengo la sensación de que existe un hueco para mí en ese lugar. Con mi proyecto puedo viajar a muchos lugares y últimamente en mi propia tierra he tenido la fortuna de ser recibida con amor y eso a mí lo que me hace creer es que yo transmito bien quiénes somos las mujeres mexicanas, entonces ir a otros países y poder establecer ese vínculo —ya sea con otros latinos o con otra gente que no tiene nada que ver con nuestra cultura—, pues lo veo completamente motivante y además así como a los demás les muestras algo, uno aprende mucho también. Viajar es parte del cultivo de una sociedad.
Nuevo disco
El nuevo disco no esta ahorita definido en un sentido protagónico de la producción, pero lo que sí te puedo decir es que tengo 10 invitados. Ninguno de ellos son duetos ni nada de esas cosas, sino que son colaboraciones musicales muy interesantes y muy bellas que estoy trabajando con mis músicos, con los Elys Guerra nuevamente invitados a participar de lleno en el proyecto; y estoy sintiendo una energía muy diferente a todo lo demás que va a producir que cada uno de los temas de este nuevo disco tenga un halo muy diferente, muy masculino, como lo decía antes.
Podríamos asumir que yo estoy intentando hacer un experimento en el que la gente comprenda que la música hecha por mujer tiene otro complemento que una mujer nunca a va a tener, un ingrediente completamente masculino; y si bien tenemos una parte masculina, yo creo que las mujeres siempre tenemos un espacio donde vamos, cuando escribimos, cuando creamos artísticamente. Entonces, lo que trato de decir es que en este sistema de fórmulas que existen en las compañías disqueras o en la necesidad de generar a la música como un negocio, a las mujeres nos están queriendo exprimir en lugares inexistentes. Para mí esto es un completo experimento científico en el que estoy a punto de demostrar que las mujeres tenemos una parte muy valiosa e imposible de corromper.
Musicalmente, todo lo que yo hago es completamente igual y completamente diferente. Vivo en un fuerte estado de ambivalencia: la paso muy bien, pero la paso muy mal. Es una situación en la que en un momento estoy de muy buen sentido del humor y al mismo tiempo ¡qué de mal humor estoy! Y lo mismo vivo en mis canciones, son canciones muy similares a lo que he venido haciendo en toda mi carrera, pero la diferencia está en que yo no puedo ni hablar ni transmitir de la misma manera como hice un primer disco, y eso es lo interesante de este trabajo creativo, que a mí me permite ser “yo”, que tengo la fortuna de defender mis diferentes proyectos porque hablan de mí, no hablan de alguien ajeno, hablan de mí y no me permiten mentir.
Entonces, es un trabajo auténticamente complejo lo estoy desarrollando con diez diferentes músicos que admiro y respeto, y además también invité a mis Elys Guerras que también son complejos como la tiznada pero me hacen crecer mucho. Es una parte muy masculina en mi vida, demasiada testosterona alrededor, lo cual es increíble.
Anti-estática
Pues, lo que pasa es que yo trabajo con cuatro músicos que son capaces de hacer cosas que no estén ya estudiadas y manejadas, o sea tengo cuatro músicos a los que les puedo pedir cualquier cosa y sé que me van a responder; y al mismo tiempo todos tenemos un espíritu de improvisadores, porque ellos se dedican al jazz, a la música clásica contemporánea y yo de alguna manera nunca he estado casada con los formatos.
Para mí es importante el cambio, ustedes lo ven en mi imagen, en mis cabellos, en todo eso. Entonces, tener unas canciones montadas de la misma manera siempre a mi me hace un ser triste. Si yo tengo pareja, un día le llego rubia otro día le llego morena y le digo, “bueno, aquí esta la rubia que tanto deseabas” y eso hace que mi pareja crezca en deseo y en muchas otras cosas y yo creo que eso pasa igual con la música, me gusta mucho seducirlos de muchas maneras. Tengo la fortuna de que mis músicos acceden a esa seducción, porque para mí es importante el cambio, si yo tengo que hacer forzosamente un show, uno tras otro igual, para mí sería una desgracia.
Es como el amor, si uno se dedica a lo mismo terminas enfadando al de enfrente y por eso hay que correr por alguien más. Cuando uno tiene la apertura de ser diferente, de buscar cosas nuevas, de entender que en la sorpresa esta el halago y la dedicación, que en la sorpresa se encuentra la fórmula para mantener unido a un equipo, entonces ocurren cosas maravillosas para mi misma también.
Cuando yo me entrego a conciertos en los que no sé qué va a ocurrir, yo misma encuentro felicidad, pero cuando no, uno simplemente fue, cantó, comió, vivió lo que tenía que vivir, porque de esa manera estamos acostumbrados a vivir y de esa manera nos educaron. Pero, si se puede experimentar es cuando uno de verdad vive, para mí es importante experimentar en el escenario.
El amor
Te voy a contar que ahorita estoy soltera, por si quieres hacerme promoción, porque Gil (Cerezo, vocalista de Kinky) ya no está en mi vida desde hace un año. En su momento, fue triste y ahora estoy contenta. El y yo estamos muy bien por separado, pero ciertamente él disfrutó a muchas de mis Elys, a Ely rubia, Ely Afro, y además a una Ely muy loca y muy desesperada que quizá en algún momento lo desquiciaba, pero estoy segura de que la locura forma parte del amor. Así que… nada, soy afortunada de haber estado con él cinco años.
“Peligro” / from: spumario
